El Tiempo en la Educación Inicial – Contenidos
VI.1- El Tiempo en el Jardín Maternal
VI.2.A-La Organización del Tiempo Anual
VI.2.B-La Organización del Tiempo Diario
VI.3- El Tiempo en el Jardín de Infantes
VI.3.A-La Organización del Tiempo Anual
VI.3.B-La Organización del Tiempo Diario
VI.1- El Tiempo en el Jardín Maternal
El tiempo en las Instituciones de Jardín Maternal debe estar centralmente al servicio de los niños y su familia y permitir una organización institucional adecuada para la tarea de “cuidado” y de “enseñanza”.
Las condiciones básicas para la organización del tiempo son: Flexibilidad y Adecuación a Necesidades Múltiples, en relación con la tríada Niño-Familia-Institución y sobre la base de acuerdos institucionales.
El carácter de flexibilidad del tiempo es un requisito básico, en tanto en el Jardín Maternal se está en presencia de cuestiones inherentes a la atención individualizada y grupal, de diferentes tiempos y horarios de sueños, de alimentación, de juegos, de ingresos a las salas maternales entre otros. Tanto en lo inherente a los niños en sí mismos como a las necesidades y posibilidades familiares (por cuestiones profesionales, laborales, etc.).
En este último sentido se requiere que las instituciones de Jardín Maternal se organicen en turnos para atención de todos y cada uno de los niños durante toda la jornada y cuenten con personal de apoyo para la colaboración en momentos de la alimentación o el cambiado. Se debe confeccionar un Registro de Organización Horaria de alimentación, deposición, sueño y cambiado, el que será entregado al recibir y entregar cada turno.
VI.2.A-La Organización del Tiempo Anual
La organización del tiempo anual incluye tres (3) períodos: Inicio, Desarrollo y Cierre.
El Período de Inicio refiere al momento de ingreso de los bebes y deambuladores al Jardín Maternal llevados por sus padres/familiares y recibidos por Docentes/Adultos de la institución, quienes deben estar abiertos y dispuestos a conocer y recibir a los nuevos integrantes y sus familias, como así también brindarles información y contención.
Es frecuente el ingreso de bebes en diferentes tiempos, en todos los casos deben ser recibidos por un docente/adulto de forma personalizada, directa, afectuosa. Recordando siempre la necesidad de contar con dos adultos por cada grupo de bebes para que uno reciba el ingresante y otro se quede con el grupo.
Atendiendo a que los bebes y deambuladores necesitan de tiempo para establecer relaciones afectivas con los adultos, con los demás, con las actividades cotidianas y sentirse seguro en el espacio físico; es necesario que permanezcan con el mismo grupo de pares y educadores, en el mismo espacio físico, durante un año. Los pasajes anuales de un grupo o sala deben realizarse siempre con el acompañamiento de uno de los educadores, en sub-grupos, de manera gradual. Esta gradualidad implica una primera instancia de situaciones de juego, luego el cambiado y la última instancia el sueño.
El Período de Desarrollo pone especial atención en el logro de los objetivos institucionales. Tomando en cuenta las experiencias desarrolladas en el período de inicio se realizará la planificación de recorridos de enseñanzas para cada grupo de niños. Las actividades se organizarán de acuerdo al calendario y a lo planificado institucionalmente considerando diferentes instancias que incluyan a niños pequeños, docentes/adultos y familias.
Las instituciones y docentes/adultos de salas deben elaborar Registro Narrativos con el propósito de documentar aspectos relevantes de los procesos que van realizando los niños. Esta información se constituye en importante y necesaria para las familias y para otros docentes en el pasaje de sala.
El Período de Cierre puede marcar el final de un tiempo de trabajo y experiencias compartidas, el pasaje a otra sala, a otra institución. Los pasajes de salas se pueden trabajar organizar trabajando actividades en conjunto con los nuevos referentes.
Es necesario que los docentes/adultos organicen actividades en conjunto para que los niños, las familias, los educadores se conozcan, se inicien en la conformación de lazos.
En el caso de niños pequeños que se despiden de la institución, ya sea definitivamente o periódicamente, es importante comunicar el cambio para que los otros niños que permanecen en la institución y sus familias puedan elaborar el cambio.
VI.2.B-La Organización del Tiempo Diario
Implica considerar y anticipar el ritmo y la regularidad en las que se suceden las experiencias que entrelazan las actividades cotidianas (alimentación, higiene, descanso) con las propuestas de juegos y otras actividades de enseñanza (escucha de cuentos, exploración de objetos, expresión corporal entre otras), y; el modo en que suceden las transiciones entre dichas actividades.
La planificación del tiempo diario debe ser flexible, teniendo en cuenta los horarios personalizados en el caso de bebes y niños pequeños. Con tendencia a instaurar tiempos sociales a la medida que los niños crecen.
También se deben considerar la alternancia entre situaciones de grupo total y de pequeños grupos en los que se ofrecen la variedad de propuestas y la posibilidad de acciones simultáneas tanto para los adultos (uno cambia, otro juega, uno alimenta, otro acuna), como para los niños quienes pueden elegir en una oferta de posibilidades (uno se hamaca, otro juega con libros, otros con pelotas).
Es importante alternar tiempo en el espacio interior y tiempo en el espacio exterior, tiempo de actividades con poco movimiento y otras con actividades corporales y motoras.
“Lo fundamental es recordar que el tiempo tiene que estar a disposición de los niños y no ellos a disposición de un único orden institucional” (Soto y Violante 2005)
VI.3- El Tiempo en el Jardín de Infantes
VI.3.A-La Organización del Tiempo Anual
El Periodo Inicial corresponde a una primera etapa del año, momento en el cual se recibe a los niños y niñas y a sus familias, institucionalmente y en las salas, momento del año en el que se establecen los primeros vínculos. Este periodo persigue el propósito de ofrecer las condiciones institucionales, materiales, afectivas y sociales adecuadas para que los niños puedan lograr establecer vínculos de confianza y seguridad en el nuevo contexto social. Esto supone planificar las propuestas que se le ofrecen a niños y familias tomando decisiones en relación con los tiempos, los grupos, los espacios, materiales y los contenidos a enseñar.
En los primeros días el tiempo de permanencia de los niños en la institución será organizado tratando de evitar el acortamiento de la jornada. Se tendrán en cuenta las escolaridades previas de cada niño, ya que si ha transitado anteriormente un año escolar, en cualquier institución de carácter escolar formal, no formal, o asistencial, no necesitará tiempos especiales para desprenderse con seguridad de sus familias. Lo necesario, es que, la docente diseñe propuestas pedagógicas creativas, integradoras, que inviten a la acción para conocer y que estimulen el deseo de permanecer en el jardín. La presencia de la familia, en este periodo, se mantendrá el tiempo necesario hasta que los niños/as construyan confianza y seguridad.
El ingreso de los niños a la institución será en grupo total, para evitar irrupciones en el inicio del año escolar, a la vez de considerar a este periodo caracterizado por situaciones educativas centradas fuertemente en el compromiso afectivo-social. Esto significa la separación de los niños de sus figuras de sostén familiar y la posibilidad de iniciar una red de vinculaciones con otros adultos y otros pares.
El Periodo de Desarrollo es el momento central del año escolar, donde se desarrollarán los contenidos contextualizados en el Proyecto Curricular Institucional (PCI), que serán abordados en las Unidades Didácticas, Proyectos y Secuencias Didácticas que surge del Diagnostico grupal del Periodo Inicial, y considerando el contexto natural y social en el que se encuentra inserto el Jardín de Infantes. Incluye los objetivos de la educación inicial, con la integración de las diferentes áreas de aproximación al conocimiento, siendo la función principal del jardín construir saberes educativos socialmente elaborados. Cada institución en su contexto natural, social y tecnológico, define objetivos que permiten promover el aprendizaje de los niños como sujetos de derecho, a desarrollar la capacidad creativa y el placer por el conocimiento; la construcción de valores, afianzar la capacidad de expresión y comunicación a través de los distintos lenguajes verbales y no verbales, mediante experiencias enriquecedoras y la transmisión de saberes propiciando la participación de la familia y atendiendo las desigualdades educativas.
El Periodo Final está destinado principalmente a la evaluación final, en este último trayecto del ciclo lectivo el docente –según su propuesta pedagógica- afianzará los contenidos que aún no hubieren sido fijados conforme a los objetivos propuestos para cada sala o sección. Esta etapa proporciona información sobre el desempeño de los niños orientando decisiones vinculadas con dos aspectos: el avance en la tarea y la certificación que acredita el término de la sección de jardín.
Este período da lugar a la reflexión acera de los logros, obstáculos, las dificultades en el logro de aprendizajes y experiencias de los niños programadas para el año. Asimismo brinda elementos a tener en cuenta en el tránsito de una sección a otra o de un nivel siguiente, y, recopila las evaluaciones de los periodos anteriores.
VI.3.B-La Organización del Tiempo Diario
La organización del tiempo diario para el desarrollo de las actividades es uno de los aspectos primordiales de la práctica pedagógica en el Jardín de Infantes. Constituye una herramienta que contribuye al desarrollo de un proceso educativo propiciador de experiencias altamente significativas para los niños, en coherencia con sus características, intereses y necesidades.
Este proceso de organización del tiempo diario implica, además, el mantenimiento de una actitud de apertura que posibilite la valoración de una dinámica cooperativa e interactiva en un marco de respeto a la individualidad, atención a la diversidad, al tiempo que, se promueven la independencia, el descubrimiento, la exploración del entorno y materiales, así como la consolidación de relaciones interpersonales. De ahí la necesidad de organizar para mantener la atención de los niños, eligiendo los medios y otros elementos auxiliares que permitan desarrollar una programación diaria donde se incluyan acciones para el juego libre individual y en grupo.
El modo de gestionar el tiempo se plasma en la planificación que puede tener diferentes formatos (proyectos, unidades didácticas, entre otros) y se organiza contemplando las necesidades, característica e intereses del grupo.
Mantener un esquema diario, proporciona a los niños la posibilidad de saber qué pasará luego de lo que está haciendo, creando de esta manera un clima de seguridad y confianza al poder establecer una secuencia de los acontecimientos día a día. Esto les permite reconocer el valor de un programa de vida escolar ordenado, conocer las secuencias de los hechos, experimentando confianza seguridad.
Gibaja (1993) establece una diferenciación entre Tiempo Instructivo y el Tiempo Inherte. El primero refiere al tiempo académico dedicado al aprendizaje de contenidos adecuados a las posibilidades de los niños. El segundo se describe como aquel tiempo en el que el potencial de aprendizaje está ausente, la actividad del docente no es de enseñanza.
En el marco de la consideración del tiempo instructivo como esencial para la educación de los niños, se concibe que cada momento de la jornada constituye una secuencia de actividades, por lo que se deberá respetar la organización de la misma contemplando actividades en los diferentes momentos que se desarrollan en la jornada diaria, y los tiempos aproximados para la realización de las actividades previstas para cada uno de los momentos:
Iniciación (15´) Formación. Izamiento de la bandera (turno mañana). Saludos a las docentes y compañeros. En la sala: asistencia diaria; calendario; comentarios ocasionales: estado del tiempo. Comentarios de interés.
Juego-Trabajo o Trabajo- Juego (50’) Juego-Trabajo: Actividad en los Sectores de Dramatizaciones; Construcción; Juegos Tranquilos; Biblioteca; de Ciencias; de Arte; otros. Las temáticas que se abordarán en estos sectores podrán o no estar relacionados con el tema de la Unidad Didáctica o Proyecto que se está desarrollando. En el transcurso de la semana el momento de Juego- Trabajo se organizará con actividades en los sectores, dos o tres días aproximadamente.
Trabajo –Juego la producción resultante se utilizará para desarrollar las actividades de Juego.
Juegos al Aire libre (20’) Juegos en aparatos al aire libre, Juegos organizados.
Merienda- Higiene y Descanso (30’) Lavado de manos, preparación de la mesa, compartir merienda, entre otras. Al finalizar: Cepillado de dientes. Limpiar la sala. Ejercicios de relajación.
Experiencias en Conjunto (30’) Incluye: Experiencias científicas; Enseñanza de poesías; Presentación de técnicas grafo-plásticas; Presentación de diferentes tipos de juegos; Conversaciones dirigidas sobre un tema determinado; Presentación de una efeméride; Salidas didácticas. Otros.
Áreas Especiales Música, Educación Física, Idioma, Tecnología, Teatro, Inglés. Otros.
Narración (30’) Relatos o lecturas de cuentos, fabulas, leyendas.
Despedida (10’) Organización de la sala. Formar. Arriamiento de la bandera (turno tarde). Saludo a las maestras, a los compañeros y al jardín.